Top

Content on this page requires a newer version of Adobe Flash Player.

Get Adobe Flash player

http://citizengo.org/
Por Luis Losada · 27/07/2016

ULTIMA HORA (27 DE AGOSTO) PAPA FRANCISCO: EL MUNDO ESTÁ EN GUERRA
Martes 26 de julio de 2016. Misa de 9 de la mañana en la parroquia de Saint Etienne du Rouvray (Normandía, Francia) Dos islamistas radicales irrumpen en medio de la eucaristía y secuestran al sacerdote oficiante, P. Jaques Hamel, a dos monjas y a otros dos feligreses.
Obligan al padre a arrodillarse y le decapitan a cuchillo mientras graban la escena y hacían una especie de sermón en árabe alrededor del altar, relata una de las monjas que logró huir. “Le obligaron a ponerse de rodillas, intentó defenderse y fue cuando comenzó el drama”, relata otro de los testigos.
#JeSuisJaquesHamel
La policía llega tras el brutal asesinato y abate a los dos islamistas radicales.
El Estado Islámico reivindica el atentado. Se trata del primer ataque contra la fe cristiana en Europa.
En sus publicaciones internas ya habían advertido de la obligación de los combatientes de atacar iglesias cristianas, sacerdotes y fieles:
“Los militantes deben recordar que la victoria viene sólo por la gracia de Alá, el Altísimo, y con cualquier medio que está disponible, ya sea con un simple cuchillo de cocina u otros objetos punzantes”
#JeSuisJaquesHamel
¿Quién era Jacques Hamel? Era un sencillo cura de pueblo de 86 años. Nacido en 1930 fue ordenado sacerdote en 1958. En el 2008 cumplió las bodas de oro sacerdotales y un día antes de encontrar la muerte y el martirio celebraba su santo, Santiago Apóstol.
Los feligreses le han definido así en diversos medios de comunicación y redes sociales:

    • Asumió sus funciones hasta el final (…) Buen cristiano, discreto y muy querido en la ciudad”
    • “Un hombre bueno, siempre al servicio de los demás y con un carisma sincero”
    • “Una persona cálida, simple y que vivía modestamente.”
    • Me bautizó, me enseñó el catecismo... Estoy indignada, conmocionada, triste...”
    • “Mi familia lleva viviendo aquí 35 años y siempre hemos sabido de él". 

El decano de Sotteville -lès –Rouen, el abad Aimé -Rémi Mputu Amba, le define así:
“Era un sacerdote muy apreciado. El rayo de sol de nuestras reuniones parroquiales”
Hasta el imán de Etienne-du-Rouvray, Mohammed Karabila, se muestra horrorizado por el brutal asesinato de su « amigo », el P. Hamel:
“Todas nuestras oraciones son para su familia y la comunidad católica (…) Es alguien que dio su vida por los demás. En la mezquita estamos anonadados”

El párroco de la parroquia donde servía como coadjutor, el P. Aguste-Phuati Moanda, señala lo siguiente:
“En mi ausencia, es él quien hace los oficios de la Iglesia. Es un hombre enérgico para su edad. Los sacerdotes tienen el derecho de retirarse a los 75 años, pero él todavía se sentía fuerte. Decía que no hay suficientes sacerdotes y que podía continuar. Ha preferido mantener su plaza y continuar trabajando”
Y es que el P. Jacques Hamel entendía el sacerdocio como una vocación, un llamado, una misión. Por eso nunca pensó en “jubilarse”, aunque técnicamente tenía derecho tras cumplir los 75 años. Así lo explicaba él mismo:
'¿Alguna vez has visto un cura retirado? Seguiré trabajando hasta mi último aliento'".
Su obispo, el arzobispo de Ruan, Mons. Dominique Lebrun, señaló lo siguiente:
“La Iglesia Católica no puede tomar otras armas que la oración y la fraternidad entre los hombres. Dejo aquí a cientos de jóvenes que son el futuro de la Humanidad. Les pido que no bajen los brazos ante la violencia y que se conviertan en los apóstoles de la civilización del amor (…) Clamo a los hombres de buena voluntad e invito a los no creyentes a unirse a este grito. Con los jóvenes de la JMJ, rezamos ante la tumba del padre Popielusko en Varsovia, asesinado durante el régimen comunista”.
En esta misma línea se manifiesta el card. Sarah en tuiter: ¿"cuantos muertos, cuantas cabezas decapitadas hacen falta para que los gobiernos occidentales reaccionen?"
http://i.imgur.com/p06rN8x.jpg
Escribe ahora en el libro de condolencias que entregaremos al obispo de Ruan (Normandía, Francia)
#JeSuisJaquesHamel
Mostrando FullSizeRender.jpg
Para más información:
VIDEO: un sacerdote explica que el P. Jaques Hamel es un mártir
VIDEO (en francés) Entrevista al P. Hamel en 2009 con ocasión de la Navidad
Presidente de la Conferencia Episcopal francesa pide que el viernes 29 sea de ayuno y oración (en francés)
El presidente de Lombardia (Italia) pide al Papa Francisco que declare “santo súbito” a Jaques Hamel
Reacciones ante el asesinato del P. Hamel
Obispos de Francia convican día de oración y ayuno por el asesinato del P. Hamel
Ultima carta del Padre Hamel (junio de 2016)
Un editorialista del Wall Street Journal anuncia en tuiter su conversión al catolicismo tras el asesinato del P. Hamel
http://i.imgur.com/F8k7zU7.jpg

 

 

 

 

http://infocatolica.com/?t=opinion&cod=27094

 

EL TERROR ISLÁMICO EN FRANCIA Y ALEMANIA

TAMBIÉN SE DEBE TENER EL VALOR DE DECIR QUE EL ISLAM TIENE ELEMENTOS DE VIOLENCIA EN EL CORÁN Y EN LA VIDA DE MAHOMA. SI SE CONTINÚA DICIENDO QUE «EL ISLAM ES UNA RELIGIÓN DE PAZ» SOLAMENTE CREAMOS CONFUSIÓN Y PERPLEJIDAD.
27/07/16 5:24 PM

Samir Khalil
Sacerdote Jesuita
Otros artículos del autor:

Un sacerdote, el p. Jacques Hamel, de Saint-Etienne en Saint-Etienne-du-Rouvray (cerca de Rouen, Francia), fue muerto esta mañana por dos individuos que además tomaron como rehenes a una monja y a algunos de los fieles, mientras era celebrada la misa. La hermana está gravemente herida, al igual que algunos de los rehenes, que resultaron heridos. Los dos atacantes murieron por la intervención del ejército, y el presidente François Hollande dijo que tenían vínculos con Isis (Estado islámico, o Daesh) y de hecho se consideraban «soldados del Estado Islámico». El Consejo Francés del Culto Musulmán condenó el acto «vil y brutal», pidiendo la cohesión y la unidad entre todos los franceses. El Papa Francisco, en un comunicado del Vaticano, «se asocia al dolor y el horror» y «condena de la manera más radical» el ataque y el «bárbaro asesinato».
La serie de asesinatos y ataques en los últimos días en Alemania y en Francia hoy son un reto a la política de la integración de los musulmanes en Europa. Pero, sobre todo, pone de relieve, la estupidez, la «falta de sentido moral» de la política europea y quizás también su «ignorancia» cuando se trata de Islam. El que habla es uno de los mayores expertos en el mundo del Islam, el p. Samir Khalil Samir, jesuita, actualmente profesor en el Pontificio Instituto Oriental de Roma, que ​​durante el verano se trasladó a Alemania para trabajar.
De los tres incidentes graves que han afectado a Alemania (en el tren de Würzburg, en Múnich, en Ansbach), sólo uno de ellos parece estar fuera de la relación con el mundo islámico, el de Múnich. Hasta el momento, la policía no ha encontrado ninguna relación entre el joven alemán-iraní e Isis. Además, estuvo en tratamiento psicológico. Ha sido - eso parece - un acto de locura. Un amigo suyo lo salvó, quitándole la bolsa con 300 balas. Por el momento la policía dice que no hay evidencia de vínculos con el islamismo. En el caso de los ataques en Francia (Rouen, Niza, París, etc ...) el vínculo con ISIS es claro.
Para el joven de Würzburg, que hirió a cinco personas en el tren, los lazos con Isis están probados. Lo mismo ocurre en el caso del joven que se hizo explotar en Ansbach. Lo sorprendente es que son todos jóvenes; todos conocidos por la gente no como fanáticos, o particularmente religiosos; todos ellos con situaciones tranquilas, no problemáticos. El de Würzburg estaba en una familia adoptiva, de la cual él no se fiaba. En cualquier caso, nadie previó semejante desarrollo terrorista.
Los tres casos son sorprendentes porque son muy jóvenes, no ligados a cualquier campo de entrenamiento; todos iban a la escuela... Todavía no está clara la forma en que entraron en contacto con Isis. Ciertamente, no fue directamente, sino a través de Internet, donde están a la luz del sol las propuestas violentas.
Tantos ataques en unos pocos días han creado confusión en Alemania, aunque la policía mostró toda su eficiencia, especialmente en Múnich: se las arreglaron para desplegar un control de la situación realmente admirable.
En el caso de Würzburg, el joven fue muerto por un oficial de policía. Alguien le ha reprochado por haber disparado, pero el ministro del Interior lo elogió.
Todos venían de ámbitos pacíficos, ni pobres, ni ideologizados. Es diferente del caso de Niza, donde el atacante había calculado con tiempo todo el golpe; incluso cerró su cuenta en el banco y envió 100 mil euros a sus parientes (¿regalo de Isis?). Incluso sus amigos dijeron que el joven tunecino tenía todo planeado.
En el mundo árabe se dice que detrás de todo fenómeno terrorista islámico están Arabia Saudita y Qatar. Al comienzo de su historia, el movimiento fundamentalista era para destruir el elemento chií en Irak e Irán. Luego se convirtió en una lucha contra todos.
En el caso de Alemania, todo el mundo se sorprende: ella ha recibido más de un millón de migrantes y los trata bastante bien. Un centro de refugiados cerca de mi casa trabaja muy bien: los niños van a la escuela, reciben subvenciones, los adultos comparten una escuela de alemán en la noche ...
El cambio repentino entre estos jóvenes no es nada nuevo.
Ahora la crítica hacia Ángela Merkel es muy fuerte, y todos la critican por su generosidad en la acogida. Tal vez la situación está cambiando: antes eran unos unos pocos miles, la integración era calificada. Ahora que los refugiados se han convertido en cientos de miles, tal vez el programa de integración no cuenta con más.
Muchos alemanes dicen que está en crisis el proyecto de integración, y esto debido a que el número de migrantes está siendo demasiado grande. He de decir que en comparación con el resto de Europa, Alemania era realmente un modelo en los esfuerzos para integrar a los inmigrantes.
todavía hoy, la solución es la integración, y no el rechazo de los migrantes. Por desgracia, el islam es difícil de integrar, ya que tiene una cultura, en muchos puntos, opuesta a la corriente de Occidente. Desde el punto de vista religioso, social, de las relaciones hombre-mujer, en relación a la comida... es un sistema completo. Que la religión sea diferente no es un problema. Pero el hecho es que en el islam la religión está ligada a un sistema político, social, cultural, histórico, de costumbres, que afecta todo: el vestir, el dar la mano a uno u a otra, las relaciones sociales...
Son tantas las cosas que hacen que sea difícil asimilar las ideas de Occidente.
En el pasado, cuando eran los norafricanos quienes llegaban a Europa, estos ya estaban un poco secularizados, o porque habían sufrido la colonización francesa y por el estilo impuesto por sus líderes (en Túnez y en Argelia), o porque eran bereberes, etnia local que se negaba a ser llamada «árabe».
Hoy, sin embargo, la influencia islamista radical que propone un mundo diferente en todos los aspectos, hace que sea mucho más difícil la integración.
Si se mantiene la posición islamista (los Hermanos Musulmanes, los salafistas, etc...) la integración es difícil. Pero si se acepta ser musulmanes abiertos, que también quieren aprender de la sociedad occidental, entonces sí es posible. Una vez era así: la sociedad occidental se consideraba un modelo para el desarrollo y la emancipación. Pero hoy en día es todo lo contrario: para muchos musulmanes la sociedad occidental ha de ser rechazada. Y mientras tanto, se crea un nuevo modelo islámico o islamista (fundamentalista).
Para nuestro siglo, este es un gran conflicto.
También se debe tener el valor de decir que el islam tiene elementos de violencia en el Corán y en la vida de Mahoma. Si se continúa diciendo que «el islam es una religión de paz» solamente creamos confusión y perplejidad.
Ayer escuché un discurso de la primera ministra británica, Theresa May, que pronunció cuando aún no era primer ministro - hace tres años – en el cual, en una reunión con musulmanes repitió mil veces: «¡El islam es una religión de paz!, ¡el Islam es una religión de paz! ¡No hay un solo versículo en el Corán de violencia!». Y recibió el aplauso de los presentes. Todo esto es increíble: es un intento de minimizar el problema. Y esto viene principalmente de los líderes políticos europeos, más que de la población.
¿Por qué hacen esto? Para obtener los votos de las comunidades musulmanas. En Francia también es así: desde hace varios años en Francia el gobierno puede donar tierras para mezquitas y centros islámicos con alquiler gratuito durante 99 años. Así, Francia se está llenando de mezquitas financiadas por los países que apoyan el terrorismo. Entre los políticos hay una pérdida del sentido moral, ya que están dispuestos a hacer cualquier cosa para ganar votos. Y hay también una pizca de ignorancia: ¡nadie puede decir que en el Corán no hay versículos violentos! La ignorancia y la pérdida del sentido moral es una mezcla explosiva.

P. Samir Khalil, sj
Publicado originalmente en Asia News

 

http://infocatolica.com/?t=opinion&cod=25739

 

ARABIA SAUDITA CONTRA IRÁN, POR EL DOMINIO EN EL MUNDO ISLÁMICO

SUMADO A TODOS LOS PROBLEMAS POLÍTICOS Y ECONÓMICOS QUE EMPUJAR AL ENFRENTAMIENTO ENTRE LAS DOS POTENCIAS REGIONALES, HAY UNA LUCHA ARMADA ENTRE DOS MODOS DE VIVIR EL ISLAM: AQUÉL MÁS TOLERANTE Y RACIONAL DEL CHIISMO, Y AQUÉL FUNDAMENTALISTA Y VIOLENTO DEL SUNNISMO. ARABIA SAUDITA AMPLÍA SU HEGEMONÍA A TRAVÉS DE AYUDAS ECONÓMICAS, DE LA CONSTRUCCIÓN DE MEZQUITAS Y DEL ENVÍO DE IMANES WAHABITAS. EL FUNDAMENTALISMO -TAN CERCANO A LA IDEOLOGÍA DE ISIS- SURGE TAMBIÉN EN PAÍSES QUE EN OTRO TIEMPO SUPIERON SER TOLERANTES: EGIPTO, INDONESIA, MALASIA. SE HACE URGENTE UNA REFORMA DEL ISLAM, QUE LO SALVE DE LA CRISIS MÁS PROFUNDA DE LOS ÚLTIMOS DOS SIGLOS.

12/01/16 10:32 AM | 

Samir Khalil
Sacerdote Jesuita
El enfrentamiento que está delineándose entre Arabia Saudita e Irán tiene, por cierto, motivos políticos y económicos: la diferencia de posiciones sobre las cuestiones siria y yemenita; la competencia en la producción petrolífera; el dominio de la península arábiga y del Golfo. Pero dicho enfrentamiento tiene también raíces religiosas, y se vincula con una lucha que ha de definir quién debe guiar la forma del islam destinada a la hegemonía.
El islam está atravesando una crisis desde hace algunos decenios: es la más grande de los últimos dos siglos. La misma asume formas variadas, de acuerdo a la política. Un punto sobre el cual es urgente y necesaria una superación es la estrecha relación entre política y religión.
En realidad, dicho problema fue afrontado desde la mitad de 800 hasta la mitad de 900: teníamos una tendencia liberal que buscaba crear Estados que fueran neutrales en términos religiosos; islámicos, porque la mayoría de la población era musulmana, pero quien no era musulmán tenía más o menos los mismos derechos. En síntesis, había una cierta neutralidad y laicismo.

Dinero y chador

Ahora, en cambio, al menos en los últimos 50 años se ve una tendencia contraria a ésta. En Egipto, por ejemplo, en Minia, en el ’73, como una suerte de signo, en la apertura de las escuelas femeninas, todas las jóvenes asistieron cubiertas, con el chador, y las manos cubiertas son guantes. La explicación: Arabia Saudita pagaba una «retribución mensual» a las familias que aceptaban cubrir a sus mujeres. Dicho pago era equivalente a un tercio del salario de un empleado. Y la gente aceptaba el dinero.
Este hábito se ha vuelto absolutamente normal. Actualmente, si una mujer no está cubierta con el velo es criticada y mirada mal. Incluso las mujeres cristianas se pasean cubiertas por el temor a ser insultadas u ofendidas.
Este deslizamiento hacia una cerrazón proviene del fundamentalismo sunnita y wahabita, de Arabia Saudita y de Qatar. Y se explica también desde el punto de vista sociológico: Egipto tenía a más de un millón de sus trabajadores en el exterior, en Arabia Saudita, que, luego de pasar algunos años allí, al regresar a su patria, se ponían a practicar los usos sauditas. Esto es aplicable también para otros países de proveniencia de los inmigrantes . La expresión corriente que podía escucharse era: «¡Dios bendiga a Arabia Saudita, maldita sea!». Arabia era una fuente de ganancias, pero a la vez una fuente de integralismo y de cerrazón.
Cosas de este tipo suceden también en Italia, donde los maridos fundamentalistas obligan a sus mujeres a seguir las costumbres sauditas o fundamentalistas. Para ellos, esta vestimenta es una categoría religiosa.
Ha de decirse que otros países del Golfo tienen visiones más tolerantes, permitiendo la construcción de iglesias y llegando incluso a financiar la misma.
Desde fines de los años ’70, con Ruhollah Khomeini, en Irán también se difundió un fundamentalismo chiita, pero los iraníes ya han tomado distancia del mismo. Hace algunos años estuve en Qom [ciudad al sur de Teherán, una especie de «Vaticano» de los chiitas iraníes, por el gran número de escuelas teológicas allí presentes-ndr], y se veía a las mujeres en el chador, todas cubiertas de negro. Pero en Shiraz, por ejemplo, las jóvenes llevaban velos de colores, que dejaban asomar algún que otro mechón impertinente de cabello rubio, o iban de la mano con su noviecito. Un ayatolá de Qom me explicó: Usted debe entender que Qom no es Irán, no obstante como ciudad santa hemos de tener cierto modo de vivir.

Sunnitas y chiitas

Existen, por lo tanto, dos fundamentalismos, pero el persa es mucho más abierto desde el punto de vista intelectual e incluso posee cierto espíritu crítico.
En Qom, por ejemplo, había 40 instituciones vinculadas a la mezquita, pero no eran organizaciones religiosas: tenían una asociación para ayudar a los sordos, otra para los ciegos, para los medicamentos, una TV para los niños, un observatorio astronómico en la montaña cercana; bibliotecas de historia, de filosofía...Una vez incluso encontré un imán, quien me confesó que cada día leía alguna página de las Enéadas de Plotino, en la versión árabe inédita, todavía manuscrita, llamada «Teología de Aristóteles». Esto es impensable en el mundo sunnita. Además, en la tradición wahabita estos libros serían quemados. De la misma manera, se persigue toda la corriente mística del Islam: recordemos lo ocurrido con Al Hallaj en el siglo IX, que fue crucificado por sus ideas y sus escritos, en los que describía su unión espiritual con Dios.
Hace algunos años, en el 2008, en el Vaticano tuvimos el primer Foro islamo-católico. Encontré a un imán que se definió a sí mismo como un «un docente de filosofía». Con él hablamos sobre un hecho que había sucedido algunos días antes: en el sitio islam.org, una oven universitaria de París solicitó ayuda pata preparar una tesis sobre Avicena (980-1037). La respuesta fue: ¡No estudie estas cosas de infieles, sino concéntrese en el estudio del Corán! El imán frente a mí, que era chiita, concluyó: Quien dio esa respuesta era, ciertamente, un imán sunnita. Ellos no entienden nada de filosofía o de ciencia.
La formación de un imán chiita incluye muchas materias que no son estrictamente religiosas , sino culturales. En cambio, los imanes sunnitas se limitan a estudiar el islam. Por eso, el diálogo con los chiitas es más fácil y amplio; el que se da con los sunnitas tiene una base mucho más restringida. La educación de los imanes sunnitas se desarrolla fundamentalmente aprendiendo de memoria los versículos del Corán, sin comprenderlo ni interpretarlo, y tampoco poniéndolo en una contexto histórico.

La supremacía en el mundo islámico

Sunnitas y chiitas no tienen la misma visión de la vida y de la religión, y por esto chocan entre sí. Este enfrentamiento existe desde el comienzo, pero en otro tiempo las diversidades erán más aceptadas. Con el wahabismo, el dogma sunnita se está imponiendo donde sea.En Pakistán, por ejemplo, las leyes sobre blasfemia, que han llevado a la condena a muerte de Asia Bibi y al asesinato de tantas personas, son de inspiración típicamente saudita. En todas las regiones sunnitas -menos en algunos países, como Egipto- se está difundiendo este fundamentalismo que rechaza el uso de la razón en la lectura del Corán.
Sunnitas y chiitas se combaten para ganar la supremacia de influencia en el mundo islámico, y para definir quién debe dialogar con Occidente. El acuerdo nuclear iraní, al que arribaron las grandes potencias con Teherán, deja el campo libre a Irán; y Arabia Saudita -que se ha opuesto al acuerdo hasta el final- todavía hoy se opone al mismo de manera vehemente. Lo mismo hace Israel, aunque por motivos distintos.
Ha de ser dicho que, en su origen, la guerra de ISIS era una guerra anti-chiita. No es casual que en Siria y en Irak gobiernan grupos que se remiten al chiismo: la minoría alauita en Damasco y los chiitas (que son la mayoría de la población) en Bagdad. Tensiones y enfrentamientos entre las dos comunidades ya se han difundido en el Líbano, en la India, en Pakistán, donde sea que haya comunidades chiitas.
Los chiitas son como mucho el 15% de los musulmanes, y, por ende, no podrán pretender ser hegemónicos en el mundo islámico. Los sunnitas, que son la gran mayoría, tienden a afirmarse de manera totalizante. A menudo, en debates televisivos en Egipto, me ha pasado escuchar a un imán sunnita que dice a sus colegas chiitas: «¡Vosotros no tenéis derecho a estar aquí! ¡Esta es una tierra sunnita!». ¡Y esos chiitas son tan egipcios como él!

Sin autocrítica alguna

Además de la tentación totalizadora, el mundo sunita tiene la tentación de absolverse siempre: no ejercita función de autocrítica alguna. Durante siglos, el mundo musulmán tuvo un carácter pluralista. Entre los siglos VIII y XIII, bajo los Abasíes con capital en Bagdad, había sunnitas y chiitas, fundamentalistas y liberales. En el siglo IX había incluso mutazilitas, que afirmaban que «el Corán había sido creado», mientras otros decían que era «increado». Si el libro sagrado es «increado», viene directamente de Dios, y no se lo puede tocar; si es «creado», entonces es posible estudiarlo e interpretarlo. Esta posición mutazilita siguió desarrollándose por siglos, sobre todo con el califa Al-Ma’mūn (813 – 833). Su sucesor, al-Muʿtasim (833-842), partidario de la posición «increada», expulsó a los mutazilitas. Pero dicha corriente permaneció a lo largo de los siglos; el Corán debe ser interpretado con la razón, con aquello más agudo e inteligente que existe en la realidad. Aún en nuestros días, esta posición es vista como una amenaza, y quienes la expresan corren el riesgo de ser acusados de herejía.
La universidad de Al-Azhar sufre este problema: siendo particularmente sostenida por Arabia Saudita, no critica la posición «increada», no obstante en el pasado ha sido esta corriente la que ha guiado con fuerza una reforma modernizante del islam.
Entre 1860 y 1950, durante casi un siglo, la tendencia era interpretar el Corán con libertad y sentido común. El gran rector de la Universidad de Al-Azhar, Muhammad Abduh (1849-1905), afirmaba que el Corán debe ser interpretado según la razón. Junto a él, estaban Jamal al-Din al-Afghani (1838-1897), iraní, Abd al-Rahman al-Kawakibi (1855-1902), sirio, y tantos otros que estuvieron entre los protagonistas de la Nahda, del Renacimiento árabe e islámico. Todos ellos terminaron luego exiliados por motivos políticos, pero en París continuaron publicando una revista mensual («El vínculo indisoluble») muy abierta, dispuesta incluso a recibir y debatir críticas al islam de personajes como Ernest Renan.
Este Renacimiento ha llevado a la construcción de Estados tolerantes con las distintas religiones. Nasser fundó la República egipcia, y su eslógan era: «La religión pertenece a Dios; la patria es de todos». «La religión pertenece a Dios» significa que cada uno es libre de elegir y practicar la religión que quiera.
Sin embargo, en los años ’70 y bajo la influencia wahabita, todo esto comenzó a desaparecer.
Pero ya en Egipto se había pasado del pensamiento liberal de Muhammad Abduh al pensamiento mediano de Muhammad Rashīd Ridā, su discípulo, a la posición de Hassan al-Banna, el fundador de los Hermanos Musulmanes. Los wahabitas son incluso más extremistas que los Hermanos Musulmanes.

Dinero y sumisión

Aquí entra en danza otra cuestión: ¿cómo hace Arabia Saudita para difundir su verbo wahhabita? Egipto recibe al menos 3 millardos de dólares al año de Riad; Sudán recibe algún que otro millardo...Para atraerlos hacia su visión, los sauditas están dispuestos a pagar, a apoyar a los gobiernos y a construir mezquitas. Más de 1000 mezquitas han sido construidas hasta ahora por Arabia Saudita en muchas partes del mundo (incluso en Italia y en Europa). Habitualmente estas mezquitas son majestuosas, enormes, y Riad paga también al imán y a los empleados. Ahora, quien paga, manda. Y, por eso, Arabia Saudita influencia el estilo de islam que se vive.
En Egipto, a causa de la influencia saudita, durante el Ramadan está prohibido vender comidas y bebidas a quien sea. Como compesación, los sauditas han comprado una zona cercana a las pirámides, que se ha convertido en un resort exclusivo, donde los ricos árabes gozan de libertades que en su país les serían prohibidas. En el mundo, la opinión es que los musulmanes tienen a los sauditas, y que ellos son «vacíos», «infieles», «corruptos», pero se garantizan su poder, incluso religioso, a través del dinero y la riqueza.
Lo que es triste es que Arabia Saudita se compra aliados «religiosos» a través de la riqueza. Es de remarcar que el estilo religioso, fundamentalista y practicante de la sharia, conduce directamente al tipo de gobierno de ISIS. Cada semana, en las plazas sauditas, hay ejecuciones -decapitaciones, latigazos, lapidaciones- que son celebradas como un rito religioso, tal como vemos en los videos difundidos por ISIS.
Quisiera agregar una puntualización más: ¡Isis no es un movimiento que ha caído del cielo, Isis es la aplicación brutal de la enseñanza difundida no sólo por Arabia Saudita, sino también por muchas universidades islámicas, incluyendo ciertas enseñanzas de la Universidad de Al-Azhar, que forma a miles de imanes al año! Este fenómeno es esclarecido por estudiosos liberales en algunas emisiones televisivas actuales. ¡La fuente que inspira a los yihadistas tiene su origen en cierto tipo de enseñanza islámica tradicional, que aún sigue siendo difundido hoy en día!

El Occidente sometido

En su intento de dominar el mundo islámico, Arabia Saudita quiere decidir el futuro de Siria, del Líbano, de Irak, de Egipto, de numerosos países africanos y asiáticos. Tiene un rol nefasto, porque no posee una visión amplia y tolerante, e ignora totalmente el pensamiento moderno: tiene sólo la sharia, y está difundiendo este estilo fundamentalista en el mundo. Y es a través de ellos que el fundamentalismo ha llegado a Malasia, a Indonesia, a las Filipinas, etc.
Desde este punto de vista, Irán, con su islam más cultivado y abierto, podría actuar como un correctivo, pero, no obstante teniendo una población más numerosa que la de Arabia, no tiene la fuerza que posee ese país. Y los chiitas se han difundido, por desgracia, en la zona del Golfo.
El enfrentamiento entre Arabia Saudita e Irán es, por lo tanto, un enfrentamiento político, pero en su raíz hay una oposición religiosa, y la lucha es por la supremacía religiosa. Por último, en el mundo islámico, la religión y la política van de la mano. 
Occidente parece razonar como los países musulmanes que son ayudados por los sauditas: parece interesarse sólo por el comercio. Los Estados Unidos jamás criticaron el comportamiento de Riad en relación a los derechos humanos, si bien en Arabia han sido decapitadas más personas que en en todos los países del mundo.
Se podría esperar que los musulmanes en Europa -son al menos 10 millones- presentasen un islam razonable y racional, abierto a todo las cosas positivas que existen en el mundo moderno. En Francia y en otras partes, hay imanes iluminados, pero se trata de una minoría, y deben expresarse de manera discreta por cuestiones de seguridad. Por otro lado, ellos no tienen todo el poder financiero e ideológico de Arabia Saudita.
Si en Arabia hubiera una visión liberal similar a la tunecina, por ejemplo. hoy tendríamos una situación islámica muy diferente, más abierta, más tolerante. Y es esto lo que la mayoría de los musulmanes desea alcanzar, sin saber a ciencia cierta cómo hacer, o sin atraverse a hacer aquello que saben que es inevitable. No se trata de imitar a Occidente en todo lo que hace -¡sería catastrófico!- ; sino que se trata de discernir en la modernidad aquello que es positivo y constructivo, para aplicarlo. En esto, pienso que los cristianos de Oriente tienen una misión de discernimiento, para ayudar a sus hermanos musulmanes a integrar lo positivo de la modernidad, rechazando aquello que es negativo.
P. Samir Khalil Samir, sj 
Publicado originalmente en Asia News


Regresar a "Para conocer más"

 
Top